Estudiantes tomaron el colegio Manuel Belgrano del barrio de Barracas, tras la realización de varias marchas, cortes de calle zonales (cortes de varias escuelas de un mismo barrio) y un festival en la puerta del colegio, pero cansados de no tener respuestas, propusieron tomar el colegio y se votó a favor.
Los estudiantes acercaron sus posiciones. Tiago decía: “Tomamos la escuela porque nos vienen dando vueltas desde el Ministerio. Conseguimos la reunión con la Ministra Soledad Acuña la semana pasada, y después de varias marchas, cortes de calle y festivales, pero nos dijo que recién para diciembre iban a tener una respuesta. Es una burla total. Le reclamamos el boleto gratuito, e increíblemente nos dijo “Esto es un problema filosófico y ustedes no pueden opinar sobre el tema”. Cuando le consultamos sobre la vianda, porque ya tuvimos 11 casos de chicos intoxicados por comer comida en mal estado, de los cuales yo soy uno, nos respondió que son “solo un refrigerio que no garantiza un almuerzo y no puede ser que estén podridas”. Le llevamos una vianda del mismo día para que lo vea ella misma. Para nosotros es un problema no tener boleto ni vianda, entramos al colegio a las 7:45 y nos vamos a las 18:20. Solo de comida son como $500 al mes, súmale viajar en transporte y los materiales del colegio”.
Otro de los estudiantes, Ulises, contó cómo lo decidieron y como se organizan en la toma: “La toma fue votada en una asamblea de casi 300 personas, pero solo para media. El ISFA que funciona a la tarde-noche continúa con clases normalmente. Se dio bastante debate ya que algunos opinaban que no era la forma, otros que no servía para nada tomar el colegio, pero al final se votó y la mayoría aprobó la toma del colegio. Además decidimos que sea rotativa junto con otros colegios. Nosotros tomamos una semana, otro toma la otra semana, y así sucesivamente. Esto lo coordinamos en la CEB (Coordinadora de Estudiantes de Base).
En este colegio tenemos 4 comisiones. Limpieza, seguridad, cocina, y arte y difusión. Todos los estudiantes participamos de alguna, o vamos rotando para que ninguno tenga la peor parte”.
Por último, Sasha dijocómo pensaba ella que había que continuar: “Yo creo que si no nos dan respuesta, tenemos que ir a tomar el Ministerio, o acampar en la puerta como me decía una compañera. Hay que hacer bardo porque si no, no te escuchan. Ahí podríamos dar talleres, hacer asambleas, y diferentes cosas”.
Los secundarios ya conocen bien la gestión Macrista en la Ciudad de Buenos Aires. Año tras año viene destinando menos presupuesto, e incluso el que destina no lo ejecuta. Mientras disminuye el presupuesto de la Educación Pública, aumenta el de la Educación Privada. Un claro ejemplo de que al Macrismo le importa más el lucro que la educación de los jóvenes. Y ahora con el ajuste en curso, y la necesidad de “achicar gastos”, vamos a ser los primeros perjudicados como ya paso con la UBA a principio de año.
Se acerca el 16 de septiembre, y es una fecha clave. No solo porque se conmemora “La noche de los lápices” sino porque también ese día va a ser la audiencia pública por el aumento de tarifas. Sería un golpe importante al Gobierno que confluyamos estudiantes y trabajadores en un gran paro nacional marchando juntos y demostrando nuestra fuerza en la calle.
